En el libro de Efesios, encontramos un pasaje que nos desafía a mirar más allá de lo evidente. Efesios 6:12 nos recuerda: “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestiales”.
El Enfoque Correcto en la Batalla
A menudo, nuestra lucha se centra en lo superficial: las circunstancias, las personas o las deficiencias visibles. Pero este versículo nos invita a cambiar nuestro enfoque. La verdadera batalla es espiritual. Detrás de lo que vemos, hay fuerzas invisibles en acción.
Batallando por la Libertad Interior
¿Qué significa esto para nosotros? Significa que debemos pelear en el ámbito espiritual. No solo por cambios externos, sino por una transformación profunda en las personas. Es más que una mejora superficial; es una libertad interior.
El Espíritu de Dios en Nosotros
Nuestra pelea no es contra carne y sangre, sino contra las fuerzas que intentan mantenernos cautivos. Debemos luchar para que el Espíritu de Dios se manifieste en nosotros. Cuando lo permitimos, experimentamos una libertad que va más allá de lo visible.
Conclusión
Hoy, te animo a mirar más allá de lo superficial. No te enfoques solo en lo que ves, sino en lo que no ves. La verdadera batalla espiritual está en juego. Que el Espíritu de Dios nos guíe mientras luchamos por la libertad en nuestras vidas y en las vidas de quienes nos rodean.
“Porque donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad” (2 Corintios 3:17). 🙏✨
